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jueves, 11 de diciembre de 2014

Podcast

Por José Luis Miyashiro.
Dice un dicho por ahí, que a la tercera va la vencida... Y espero este sea el caso, pues esta es la tercera oportunidad que trato de escribir esta entrada. Las dos anteriores como es de suponer las deseche ya que no terminaban de convencerme. Y es que tratar de explicar mi experiencia con esta nueva (para mi, pues esto ya tiene bastantes años) forma de consumir contenidos de forma auditiva me esta resultando bastante complicado. Me hubiera encantado ponerme a grabar un audio explicando lo que es un podcast, y así de esa manera al entrar en contacto con el material tendrían una mejor idea de lo que trato de contarles.

El mundo de los podcast fue para mi el descubrimiento que me mantiene enganchado, y llega en el mejor momento, pues hasta antes de esto, era la radio la que se encargaba de acompañarme mientras realizaba mis labores en el trabajo. El problema es que si son asiduos oyentes de la radio, terminaran dándose cuenta que las canciones se repiten, pero lo que es peor, todos los días a la misma hora, es decir que lo que en un primer momento te entretenía, termina a la larga aburriendo.

El formato podcast permite a cualquier persona, tomar un micrófono y ponerse a grabar un contenido, que una vez terminado y editado (si así lo desea el podcaster) lo sube a alguna plataforma. La motivación de ellos, creo según mi modesta opinión es el deseo de comunicar, y en este proceso la relación que termina estableciendo con sus fieles oyentes (ahí me encuentro yo). Los temas son tan variados como la imaginación lo permita, desde temas de investigación en ciencia, pasando por historia, tecnología, humor, magazine, deportivos, musicales, actualidad, cine, series, etc. La lista es extensa, y si le sumamos a esta clasificación de acuerdo a la periodicidad en que son realizados la lista se torna interminable. Los hay diarios, semanales, quincenales, mensuales, otros mas que son publicados cuando el podcaster buenamente se digna a grabar.

A todo esto supongo que a estas alturas se estarán preguntando que tiene esto de bueno?

Déjenme decirles lo que para mi significan. 
Son la mejor manera de pasar un buen momento, divertido muchas veces, aprendiendo mucho otras, riendo a carcajadas por las ocurrencias del o los  podcasters, en fin, toda una experiencia que se repite diariamente. 

Lo que para mi es una ventaja, puede no serlo para otros, me explico, cuando uno oye la radio, es la emisora la que esta dándonos lo que ellos creen que nos gusta ( en el mejor de los caso) y nosotros lo único que hacemos es seleccionar la estación y listo. Y es esto lo que terminó aburriendome.

La ventaja que les menciono, es la de yo poder hacer mi lista con los contenidos que quiero oír, lo que realmente me interesa y me mantendrá entretenido a lo largo de mi jornada laboral. Esto para mi es la mayor ventaja, paso de ser un oyente pasivo, a alguien que tiene el control de lo que va a oír. Es como una radio a la carta, y la verdad a terminado gustándome mucho esta experiencia.

¿Esta lista de contenidos tengo que hacerlas todas las noches?
No, pues al suscribirme a los podcast que me agradan, el reproductor que usen (en mi caso overcast) descargara automáticamente todo material nuevo que haya sido publicado.

No estoy tratando de evangelizar a nadie con esto, mucho menos diciendo que esta sea la mejor manera de pasarla bien, solo estoy compartiendo con ustedes, lo que a mi me esta funcionando en mi día a día. Es lo que me impulso a escribirles en Enero del 2012 una entrada que se llamaba “La radio", pues en ese momento eso era lo que me atraía profundamente, y compartía esa experiencia con ustedes.

Eso es todo amigos, creo que con esto me quedo mas tranquilo, pues tal vez haya alguien que se sienta igual que yo y desconozca que hay un mundo más allá de la radio comercial.

Les dejo las capturas de pantalla de los podcast que escucho, por si a alguien le interesa este mundo y no sabe por donde comenzar. Y si tienen alguna duda, pregunta, comentario, etc estoy para servirles. 







lunes, 28 de julio de 2014

Feliz 28 de Julio

Por José Luis Miyashiro
¿Puedes viajar y recorrer inmensas distancias en tiempo y espacio, en un instante? La respuesta a esta pregunta quedo más que explicita ayer, en las celebraciones por Nuestras Fiestas Patrias en el Studio Coast en Shinkiba Japón.
De la mano de Lucho Quequezana, y apelando a esa capacidad maravillosa de los seres humanos, que es la imaginación, usando un vehículo inmejorable que fue su música, nos vimos transportados a nuestra querida patria. Sintiendo esa energía que sólo se logra, cuando todos los presentes están vibrando con un mismo sentir. 
Lucho nos condujo por esas sendas que estaban profundamente guardadas en nuestros recuerdos, e hizo la magia de hermanarnos en un viaje, a todos, llevándonos a esa "Plaza de Armas" de cualquier provincia de nuestra patria y sentirnos nuevamente en nuestro país.
Emocionados y alegres, de sentir que dentro de tu corazón, siempre estará ese pedazo de ti, llamado PERU, que sea en el lugar que estemos, lo llevaremos. Será ese el motivo que a la distancia podemos alegrarnos con sus logros y sufrir con sus problemas.

Gracias Lucho por hacernos sentir el orgullo de estar hermanados por nuestra tierra, y por mostrarles a los más jóvenes (mis hijos) el amor a las raíces.
Por eso, y aún oyendo su música, les deseo a todos ustedes amigos, Felices Fiestas Patrias!

miércoles, 23 de julio de 2014

Reflexiones

Por José Luis Miyashiro .
Hace un mes ya, que escribí unas reflexiones que fueron una forma de pensar en voz alta, dialogar conmigo, por medio del papel (virtual) que me ofrecía en esos momentos mi muro de Facebook.
Ahora, más calmado, y al volver a leer lo escrito, me pareció que si bien formo parte de una catarsis, también, creo a mi entender, no eran ideas inconexas, o fuera de lugar, sino que algún resquicio de verdad traían. 
Y como los muros del Facebook son tan activos, y los contenidos escritos el día anterior tan difíciles de encontrar, si es que por suerte lo llega uno a encontrar, es que me permiti, la osadía de pasar ese escrito aquí, e incluir algunas cosas más, y compartirlo con ustedes.
Así que sin más preámbulo, comparto con ustedes mis reflexiones.
Es sumamente curioso, que a lo largo de nuestra vida, vamos acumulando experiencias, conocimientos de todo tipo e índole, pero uno en especial que viene ligado indiscutiblemente al mismo hecho de nacer, que es el de la muerte, se evite tanto.
Y creo que es por esta misma razón, por la cual, se hace muy difícil enfrentarla,  a las personas que nos a tocado perder a un ser querido .
Muchas veces, el contacto cercano con una persona que fallece, hace en si, de la misma experiencia, un enfrentarse a un hecho, que sabiéndolo que es, y sucederá, se niega, con la infantil esperanza de creer que lo que no se ve deja de existir, por eso mismo trata de alejarse, por todos los medios de cualquier hecho que  tenga que ver con el tema.
Será por estas razones que mencione antes que nos cuesta tanto mirarla de frente y sin miedo, que vivimos tratando de estar de espaldas a ella, tratando inútilmente de correr.
La muerte de un ser querido, es el recordatorio, de que esta nos alcanzará indefectiblemente. Pocos hechos son tan contundentemente seguros que sucederán, como este hecho.
La pena surge cual fuego que te inunda, liberandose de la negación  por tanto tiempo sometido.
El dolor te atrapa y hay que dejarlo estar, sentirlo, expresarlo en forma de lágrimas, que surgen del fondo de tu corazón, limpiándolo, sosegandolo.
Luego vendrá la calma, la serena calma que te permitirá sentirte y sentir  al otro, y comprender el proceso.
Negar un hecho, resistirlo sólo trae el efecto contrario, persiste, se agazapa, para poder saltar y asaltarnos en el momento menos pensado. 
Sentir la pérdida, vivir la pena y expresar esa emoción, hace que paulatinamente podamos superar y asimilarla. Aquí surge una palabra de vital importancia: Aceptación . Una vez que lo hacemos, nos alineamos al ritmo de la vida nuevamente, dejamos de luchar y empezamos nuevamente a vivir.
Un abrazo amigos y hasta la próxima.