Por: Shisa
Continúo contándoles que en las fábricas, los japoneses y sobretodos si son sapos, están atentos a lo que hablamos y si escuchan su nombre nos miran y preguntan de qué estamos hablando por eso es muy común ponerles apodos para despistarlos y poder rajar tranquilamente sobre ellos en su misma cara.
Una sorpresa que he tenido en Japón es cuando la fabrica se coinvierte en un mercado y se comienza a vender de todo, te venden desde empanada, rosquillas, alfajores, tamales hasta perfumes y autos de segunda mano en donde el que lo vende, viene con un auto diferente cada día para exhibirlo, también es clásico las rifas para ayudar al necesitado pero siguiendo la costumbre muy peruana de abusar, estas rifas se organizaban hasta para pagar las inscripciones para algún campeonato de futsal y esto colma la paciencia de cualquiera.
Tratando justamente este tema me resulta obligatorio mencionar a los latinos que dejaron sus vidas en las fabricas ya sea por accidentes de trabajo como por infartos y otras enfermedades…Que en paz descansen.
En la fabrica en la que trabajo hay varias agencias de empleo y una sola de japoneses, en una oportunidad conocí a un japonés que en su anterior trabajo era un jefe de alto rango y muy acostumbrado a realizar negocios con extranjeros y que termino trabajando en la fabrica debido a que sufrió de estrés, una persona muy inteligente y siempre nos respondía lo que queríamos saber, una vez le llamaron la atención y respetuosamente agacho la cabeza, le pregunte porque lo hacía ya que era más capaz que el jefe que era un chiquillo al cual recientemente lo habían ascendido y me respondió que cuando era jefe exigía el mismo respeto, de el aprendí mucho en cuanto a formalidades japonesas.
En la fabrica acostumbro parar con un grupo en donde hay paraguayos, peruanos, brasileños y argentinos y muy poco conversamos del trabajo sino de las costumbres y lugares de cada país, recientemente navegando por Internet, encuentro lo que es la Convención Panamericana nikkei (COPANI) encuentro cultural para enlazar a los nikkeis de toda América, fue un descubrimiento para mí ya que en cada descanso o saliendo de la fábrica, en cada conversación… tengo mi pequeño COPANI.
Continúo contándoles que en las fábricas, los japoneses y sobretodos si son sapos, están atentos a lo que hablamos y si escuchan su nombre nos miran y preguntan de qué estamos hablando por eso es muy común ponerles apodos para despistarlos y poder rajar tranquilamente sobre ellos en su misma cara.
Una sorpresa que he tenido en Japón es cuando la fabrica se coinvierte en un mercado y se comienza a vender de todo, te venden desde empanada, rosquillas, alfajores, tamales hasta perfumes y autos de segunda mano en donde el que lo vende, viene con un auto diferente cada día para exhibirlo, también es clásico las rifas para ayudar al necesitado pero siguiendo la costumbre muy peruana de abusar, estas rifas se organizaban hasta para pagar las inscripciones para algún campeonato de futsal y esto colma la paciencia de cualquiera.
Tratando justamente este tema me resulta obligatorio mencionar a los latinos que dejaron sus vidas en las fabricas ya sea por accidentes de trabajo como por infartos y otras enfermedades…Que en paz descansen.
En la fabrica en la que trabajo hay varias agencias de empleo y una sola de japoneses, en una oportunidad conocí a un japonés que en su anterior trabajo era un jefe de alto rango y muy acostumbrado a realizar negocios con extranjeros y que termino trabajando en la fabrica debido a que sufrió de estrés, una persona muy inteligente y siempre nos respondía lo que queríamos saber, una vez le llamaron la atención y respetuosamente agacho la cabeza, le pregunte porque lo hacía ya que era más capaz que el jefe que era un chiquillo al cual recientemente lo habían ascendido y me respondió que cuando era jefe exigía el mismo respeto, de el aprendí mucho en cuanto a formalidades japonesas.
En la fabrica acostumbro parar con un grupo en donde hay paraguayos, peruanos, brasileños y argentinos y muy poco conversamos del trabajo sino de las costumbres y lugares de cada país, recientemente navegando por Internet, encuentro lo que es la Convención Panamericana nikkei (COPANI) encuentro cultural para enlazar a los nikkeis de toda América, fue un descubrimiento para mí ya que en cada descanso o saliendo de la fábrica, en cada conversación… tengo mi pequeño COPANI.
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